¿Qué es la Legionella y por qué puede afectarte si no la desinfectas, aunque no lo sepas?
Junio 2025.- Cuando pensamos en peligros invisibles en nuestro entorno, solemos imaginar bacterias comunes o virus estacionales. Sin embargo, hay amenazas menos conocidas pero igual de importantes que pueden tener un impacto serio en la salud si no se controlan adecuadamente. Una de ellas es la Legionella, una bacteria silenciosa que puede encontrarse en muchos sistemas de agua y que, si no se desinfecta correctamente, puede poner en riesgo tanto a particulares como a empresas.
¿Qué es la Legionella?
La Legionella pneumophila es una bacteria que vive en ambientes acuáticos, especialmente en aguas estancadas o templadas. Se desarrolla fácilmente entre 20 ºC y 45 ºC, y encuentra su hábitat ideal en sistemas de agua artificiales como torres de refrigeración, sistemas de climatización, duchas, grifos, spas, fuentes decorativas o depósitos de agua caliente sanitaria.
El principal riesgo de la Legionella es que puede provocar una infección pulmonar conocida como legionelosis, que se manifiesta en dos formas: una más leve, similar a una gripe (la fiebre de Pontiac), y otra más grave y potencialmente mortal: la enfermedad del legionario, que provoca neumonía severa.
¿Cómo se transmite?
A diferencia de otras bacterias, la Legionella no se contagia de persona a persona ni a través del consumo de agua contaminada. La infección se produce al inhalar pequeñas gotas de agua (aerosoles) que contienen la bacteria. Es decir, ducharse, usar sistemas de climatización contaminados o simplemente estar cerca de una fuente mal mantenida puede ser suficiente para inhalar el agente patógeno sin darnos cuenta.
Por ello, el riesgo no está tanto en el contacto directo con el agua, sino en la exposición al vapor o microgotas generadas por dispositivos que funcionan con agua estancada y no tratada adecuadamente.
¿Por qué puede afectarte incluso sin saberlo?
El problema principal de la Legionella es su naturaleza invisible y silenciosa. Puedes estar expuesto en un hotel, un gimnasio, una oficina o incluso en casa sin notar ningún problema hasta que alguien enferma. Esta falta de síntomas visibles en los sistemas de agua hace que muchos descuiden las tareas de mantenimiento y desinfección, sin saber que están creando el ambiente perfecto para su proliferación.
Además, las personas con sistemas inmunitarios debilitados, mayores de 50 años o con enfermedades respiratorias previas son más vulnerables, lo que convierte a la legionelosis en una seria amenaza sanitaria si no se actúa a tiempo.
La importancia de la desinfección preventiva
La forma más eficaz de combatir la Legionella es mediante una desinfección regular y preventiva de los sistemas de agua. Esto incluye limpiar depósitos, tuberías, duchas y cualquier equipo que genere vapor o aerosoles. Para ello, es fundamental contar con productos desinfectantes específicos, eficaces contra esta bacteria.
En este sentido, los desinfectantes concentrados en pastillas como Cleanpill, de Orache Desinfection, resultan una solución práctica, segura y eficaz. Su uso permite una dosificación precisa, ocupan poco espacio y reducen el impacto medioambiental en comparación con otros productos líquidos. Además, su potencia garantiza la eliminación de microorganismos como la Legionella de forma rápida y sostenida.
Conclusión: no esperes a que aparezca el problema:
La Legionella es una amenaza real, aunque no siempre visible. La buena noticia es que prevenir su aparición es posible con un mantenimiento adecuado y una desinfección periódica. Ya seas responsable de una instalación pública, una empresa o simplemente te preocupes por la salud en tu hogar, es importante actuar de forma preventiva.
Contar con los productos adecuados, como las pastillas desinfectantes Cleanpill Legionella, y seguir protocolos establecidos te ayudará a mantener los sistemas de agua limpios y seguros. Recuerda: no se trata solo de limpieza, sino de salud pública. Combatir a la Legionella empieza por la prevención.
